Julio Cortázar murió dos años antes de que yo naciera. Murió en París. Este año se cumplen 30 años de su muerte y por eso le dedico este post mientras disfruto de un delicioso cupcake de chocolate, dulce de leche y cookies de María.
Leí Rayuela con 17 años y, desde entonces, ocupa un lugar especial en mis estanterías. Siempre que me mudo, lo llevo conmigo. Robé este libro una noche de la biblioteca de mis abuelos. Creo que estaba enamorada y me habían dado calabazas. No podía dormir. Por eso decidí levantarme en mitad de la noche y leer.
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